Impresionante obra del joven mairenero David Goméz López. Enhorabuena a
nuestro querido amigo desde esta querida Hermandad que siempre confío en
su valía desde que era un niño.
Técnica : óleo sobre lienzo
Dimensiones : 1'30 x 80 cm.
En esta obra aparecen una serie de intenciones: evangélicas, cofrades,
la representación de las distintas Hermandades de Mairena y una
intención personal, destacando la pasión, muerte y resurrección de
Jesucristo.
La composición es sencilla, en la que todas las
miradas buscan al que es protagonista del cartel, el Santísimo Cristo de
la Humildad. También interviene una diagonal que atraviesa la obra
desde la mirada del Ángel, pasando por el cáliz y terminando en la
mirada del Señor.
En la primera escena se representa el misterio
de la Hermandad de la Humildad en el que Cristo espera ser crucificado,
donde en ese momento de angustia le vendría a recordar aquel Ángel que
vino a confortarlo mostrándole el Cáliz. Cáliz hace alusión al Jueves
Santo, día de la institución de la eucaristía.
En la parte
inferior aparece una serie de elementos pasionarios que vienen a
recordar las distintas Hermandades de Mairena: el azahar (La
Borriquita), la soga (El Cautivo), la túnica (Jesús Nazareno), la cruz
(Vera-Cruz) y los clavos (Santo Entierro).
En un segundo plano
aparece la Casa Hermandad de la Humildad, vacía tras salir el Palio de
Nuestra Señora de los Dolores, madre de los humildistas y junto a este,
dos nazarenos se disponen a realizar su estación de penitencia, uno
morado y otro rojo, los colores de la Hermandad.
Por último, en
la tipografía encontramos una mariposa que alude a la resurrección del
Señor, la Cruz de Santiago, titular de la Hermandad, y el corazón con
siete puñales de la Virgen de los Dolores.